
El síndrome de Down siempre se ha asociado a discapacidad cognitiva.
Una explicación simplista del porqué es que tienen un desarrollo cerebral más lento o que tienen menos neuronas y menos conexiones entre ellas.
Pero si queremos entender verdaderamente el motivo, debemos comprender el proceso de neurodesarrollo.
¿Qué es el neurodesarrollo?
El neurodesarrollo es el proceso de crecimiento, maduración y organización de cada una de las áreas cerebrales para adquirir sus funciones.
Este es un largo proceso que comienza en la gestación y termina entre los 20 y los 24 años, que es cuando se alcanza la madurez cerebral.
Si durante ese proceso, aparece alguna alteración, afectará a las funciones propias de ese nivel y de los posteriores, puesto que unas funciones se sustentan sobre otras.
Por eso, cuanto más tarde aparezca la alteración, menor gravedad tendrán los síntomas.
En el caso de los síndromes genéticos, cuya alteración ya se encuentra en el propio ADN, afectará a todos los niveles y las consecuencias serán globales.
Sin embargo, el neurodesarrollo no depende solo de la carga genética, sino también de la interacción continua entre el niño y el medio que le rodea.
Aunque se parte de un código genético alterado, el resultado final dependerá del nivel de organización neuronal alcanzado a través de la interacción con su ambiente. |
Una estimulación adecuada en todos los aspectos: físico, cognitivo, sensorial, motor y afectivo, influirá en la cantidad y calidad de circuitos neuronales y hará que las dificultades sean menores.
Las etapas del neurodesarrollo
Aunque éste es un proceso continuo, hay ciertos momentos donde se observan más cambios:
Desarrollo prenatal
Durante los 9 meses de gestación, hay una gran producción de neuronas (100.000 millones) aunque relacionadas entre sí por muy pocas conexiones.
0-3 años
Durante esta etapa, el número de conexiones aumenta rápidamente gracias a todos los aprendizajes que hace el niño/a
El bebé nace con unos reflejos primarios que le permiten la supervivencia. Durante los primeros años, debe integrar estos reflejos hasta convertirlos en movimientos voluntarios.
La organización neuronal durante los 3 primeros años permitirá:
- controlar la postura
- desplazarse en todas sus formas
- adquirir destreza manual
- hablar
- controlar los esfínteres.
3-6 años
De los 3 a los 6 años, se adquiere el dominio del lenguaje, gracias al cual, pueden comprender el mundo que les rodea y relacionarse con los demás
6-12 años
Cuando llegan a los 6 o 7 años, los niños han conseguido una importante organización neuronal (10.000 conexiones por neurona) que le posibilitan para la enseñanza formal, la escritura y las matemáticas, ya que:
- Han adquirido una lateralidad definida: diestros o zurdos
- Pueden permanecer quietos y atendiendo
- Tienen la suficiente coordinación y destreza manual para escribir
- Dominan el lenguaje y pueden representar imágenes en su pensamiento.
Sin embargo, la mayoría de niños con síndrome de Down, a la edad de 6 o 7 años aún no tienen aún una suficiente organización neuronal para comenzar con el aprendizaje formal.
Que este proceso de organización neuronal requiera un tiempo de 6 o 7 años, no significa exista un límite temporal. Después de los 7 años podrán adquirir esas funciones, pero les costará más y necesitarán más ayuda exterior.
¿Has oído alguna vez eso de: “a él/ella le cuesta el doble” o “tiene que esforzarse más que el resto”? Pues éste es el motivo.
Ofrecerles un refuerzo académico extra no es suficiente, porque estaremos forzando desde arriba, desde la corteza cerebral. Es necesario seguir trabajando las etapas previas para que adquieran las funciones básicas que posibilitarán el aprendizaje.
12-24 años
Durante esta etapa, se alcanza la identidad personal, la autonomía y las funciones ejecutivas o superiores.
Entre los 18 y los 24 años, aumentan las conexiones en la corteza prefrontal, que es la responsable de las funciones superiores como:
- Razonamiento
- Planificación
- Pensamiento abstracto
- Comprensión de ideas complejas
- Flexibilidad
La corteza cerebral es la última capa que se activa y se organiza, pero para conseguir su máximo rendimiento, es necesario que todo el sistema nervioso esté bien organizado.
El motivo de la discapacidad cognitiva en adultos con síndrome de Down, a nivel general se debe a que no alcanzan completamente estas funciones superiores al no haber completado adecuadamente su neurodesarrollo.
Pero a nivel individual, la diferencia intelectual que existe entre unas y otras personas con síndrome de Down dependerá del nivel de organización neuronal que cada una haya alcanzado.
Si quieres saber qué terapias favorecen el proceso de neurodesarrollo, puedes leer el post: diferencia retraso madurativo y trastorno del neurodesarrollo