
El tiempo es un concepto abstracto que los niños no pueden entender hasta que no están maduras algunas estructuras de su cerebro.
Una vez que comprenden el tiempo, podrán situar los acontecimientos en el pasado, presente o futuro y utilizar medidas para saber cuánto duran las cosas.
Cómo se desarrolla el concepto de tiempo durante los 7 primeros años
Estas son las principales fases que muestran la evolución del concepto de tiempo (la edades se refieren a niños con desarrollo ordinario):
0-3 años: Cambio / Permanencia
Para comprender el paso de tiempo, es necesario que hayan adquirido las nociones de permanencia y de cambio. El cambio hace referencia a la sucesión de los acontecimientos, y la permanencia, a cuánto dura cada uno de ellos.
Comprenden que el tiempo pasa porque hay variación en las actividades y en la luz solar pero aún no perciben el orden de los acontecimientos, es decir, no saben que va antes o después.
3-5 años: lenguaje y unidades de tiempo
Ahora pueden detectar el orden de las actividades a lo largo del día y, gracias a su memoria, pueden recordar lo que hicieron ayer o lo que toca hacer mañana.
Pero para ello, necesitan poner palabras a las unidades de tiempo: ayer, hoy, mañana, antes, ahora, después, lento, rápido…
6-7 años: pensamiento lógico
Hacia los 7 años, comienza el pensamiento lógico. Ahora pueden aprender a leer las horas en un reloj o los meses en un calendario y utilizar con normalidad los conceptos de tiempo en su vida diaria.
El tiempo y su relación con el lenguaje
En desarrollo ordinario, sobre los 5 años se completa la fase del lenguaje, lo que permite poner términos a las unidades de tiempo para poder comprenderlo mejor.
Pero, como sabemos, en niños con síndrome de Down, el desarrollo del lenguaje se ve retrasado y por tanto, también los conceptos temporales.
Ellos comprenden que el tiempo pasa, pero cuando les decimos que algo ocurrirá más tarde, no saben cuánto tiempo es, por lo que continúan preguntando hasta que obtienen una respuesta válida.
Tampoco sirve de nada hablarles de minutos, días o meses, es necesario utilizar otro tipo de estrategias:
Estrategias para ayudarles a conceptualizar el tiempo
Lo mejor es utilizar materiales visuales y concretos para diferentes situaciones:
Reloj de arena
Para un breve lapso de tiempo, podemos utilizar un reloj de arena. Los hay de diferentes medidas de tiempo.
Podemos usar el de 1 minuto para que sepan el tiempo que deben cepillarse los dientes, o el de 15 minutos, por ejemplo, como cuenta atrás para dejar de jugar y recoger.
Gestos
Algo muy sencillo que les ayuda a comprender las nociones de pasado, presente y futuro es usar un gesto cada vez que hablemos de ayer, hoy o mañana.
Se pueden recordar cosas que hizo ayer como la visita de sus abuelos y hacer el gesto de ayer o avisarles de que mañana hay colegio, con el gesto de mañana.
Para saber cómo se hace el signo de la palabra que necesitas, puedes acceder a la web spreadthesign
Cartas de secuencias
Para aprender a ordenar los sucesos en el tiempo se pueden utilizar cartas o láminas de secuencias.
Se trata de 3 tarjetas que deben ordenar indicando lo que va antes, después y en último lugar. Por ejemplo, un pato, unos huevos y unos pollitos naciendo o un perro sucio, un perro recibiendo un baño y un perro limpio.

Calendario con imágenes
– Calendario semanal
Se puede elaborar un calendario semanal dividido en mañana, tarde y noche (con imágenes de un sol, un atardecer y una luna), y con los 7 días de la semana.
Yo le hice uno a María para que supiera qué días había colegio, cuando era fin de semana o cuando tenía terapia. Para las imágenes utilicé fotos propias, aunque también se pueden utilizar pictogramas.

– Calendario anual
Es mejor dividir los calendarios anuales en 4 estaciones en lugar de 12 meses. En cada estación, se pueden poner imágenes de la ropa adecuada o de las festividades importantes como navidades o vacaciones de verano.
Calendarios de adviento
Cuando están esperando que llegue un acontecimiento importante, por ejemplo su cumpleaños o un viaje, podemos hacer un calendario de adviento, siempre que no queden más de 15 o 20 días, para que vaya abriendo una ventana o simplemente tachando o poniendo una pegatina por cada día que haya pasado.
Planificadores de actividades con pictogramas
Un recurso muy utilizado en las escuelas es organizar el día a través de pictogramas que anticipan las actividades previstas para la jornada.
Si le ayudamos a construir una agenda propia, será un apoyo para que pueda explicar en casa lo que ha hecho en el colegio o, en el colegio, lo que ha hecho el fin de semana.
Normalmente se plastifican los pictogramas y se les pone velcro para poder quitar y poner, de este modo, además, si surge algún imprevisto, es más fácil de explicarles el cambio, cambiando un pictograma por otro.
Si quieres saber cómo elaborar una agenda y descargar el material, puedes hacerlo en este enlace http://aulaabierta.arasaac.org/minitutoriales-caa-elaborando-una-agenda-visual-con-pictogramas
Relojes analógicos
Cuando son mayores, es mejor que tengan un reloj analógico, ya que irán viendo realmente como transcurre el tiempo al ritmo de las agujas del reloj.
Si aún no saben leer la hora, podemos explicarles que algo ocurrirá cuando, por ejemplo, la manecilla pequeña esté en las 5 y la larga esté en las 12.